August 05, 2016

soul dive

Puse play y tuve miedo. El recuerdo, su densidad, la situación. Recuerdo exacto esos infinitos días: cama, soledad (introspección? blah), música, decadencia.

Estuve tanto viviendo entre fantasmas. Durmiendo con ellos, hablándoles, rozando su piel helada... Esta precisa (preciosa?) música, me lleva a otro momento donde dormí con ellos por innumerables eras...

Qué cambió? Todo.
Y a la vez, casi nada.

El sueño de mil años. De vidas enteras. Escenarios, recuerdos, ideas sólo vividas en el mundo de lo sutil, lo oculto, lo no-dicho, casi no-pensado, de mi mar interior: como en esa película, descendí y descendí, escalones que no debería haber pisado, bajando a lugares que mejor debería haber dejado inexplorados. Me adentré sin miramientos en el fondo de mi ser, fuera del mundo.. sideral y satúrnico.

El auto-conocimiento trae entendimiento, sabiduría, iluminación, ponele. Pero también llama la atención a ciertas cosas que mejor hubiera sido no perturbar.

De esos viajes, uno vuelve roto, cambiado, reforjado? Es para-siempre-distinto. Y ese fuego se apagó. O nunca estuvo. Quizás nunca fue mío. Quizás nada lo fue. Lo que hay en su lugar es el hierro frío de la certeza. De todos los niveles profundos, abstractos, que-no-pueden-expresarse-en-palabras, que se funden para conformar la base más primitiva de una mente humana.

La verdad, todavía creo que estoy ahí mismo. En ese mar de sábanas y penumbra eterno. Perdido, solo, sin necesitar encontrarme ni encontrar compañía. Sí, totalmente. Si cierro un poco los ojos de la percepción, caigo directo, sin interrupción temporal entre ahí y acá. Entre entonces y ahora. Entre ser y no ser. Mi persona no existía como la percibo, delimito, defino y proyecto. Es lo mejor que puedo hacer para explicarlo.

Lo añoro? Hmm, difícil pregunta. Puede ser. Sí y no. Volvería? Hmm tanto como eso no. Bah, quizás acompañado, como esa vez...? No sé. Pero también, sé que no tengo opción. No tuve sueño en décadas, pero si me busco lo suficiente, es como ese acorde en menor semi-olvidado.. una campana espiritual que soy yo y que es el mar y que es el no-universo.

..Con el tiempo, todas esas partes de mi, se volvieron parte de otros. Y lo apruebo. Siempre y cuando les haya servido en su propia exploración. Cómo lo sé? Ah, simplemente lo sé. No es megalomanía. Es eso, una verdad indiscutible, contrastada contra las evidencias mundanas que recibí. No las necesitaba, pero mi cordura apreció tenerlas. El don de la profecía quizás no es más que auto-engañarme rompiendo el orden temporal de las deducciones lógicas, recibiéndolas antes, no después?

Como cuando era ese momento. Voy a dejar esto y ver qué pasa

No comments: