Vivir en el presente es muy difícil. Creo que cada día me vuelvo un poquitito mejor, pero cada vez que me caigo, el daño que (me) hago deshace todo el camino andado. O así se siente. Tener un pequeño rayito de sol hace que la vida sea tanto más compleja.. Por momentos, me siento atrapado y atado a una vida que ya no me pertenece, a un sueño del cual fui expulsado. Y por momentos, puedo apreciar todo lo hermoso que es lo que tenga que ser que me toque vivir y experimentar.
Quisiera paz. Estabilidad. Es lo que más quiero y necesito. Sí, no puedo soltar el sueño de familia que me hace sangrar como una espina enterrada en el corazón. No puedo evitar amar. No puedo evitar dar, proyectar, ilusionarme. Pero a la vez, estoy muy mentalizado y naturalizado en que lo que es, es. Y sobre todo, que en el futuro va a cambiar, y no sé qué será. Esta tan fuera de mi control. Mejor ni pensarlo, solo existe el ahora.
..Pero me duele el rechazo, me hiere en un ego que no termina de morirse. Me destruye no sentirme deseado, mirado de esa forma. Nadie me espera, nadie me abraza, nadie me besa. Nadie me busca. No comparto mi amor físico con nadie. Nadie está suspirando pensando en besar estos labios o acariciar este cuerpo. Mi energía sexual está tan estancada.. no me creo capaz de nada. Es un círculo vicioso. Porque deseo a quienes no me ven de ninguna forma. Es tan frustrante y triste, que me hundo.
Mi empatía está fuera de control. Es un mar furioso y desbordante. Si alguien se golpea, siento su dolor. Si alguien llora, mi alma llora. Si alguien se indigna, siento el fuego en mi propio corazón. Tengo que hacer el ejercicio de respirar todo el maldito tiempo para no explotar y derretirme a la vez. Esto por momentos no es forma de vivir. Y a la vez, cuando siento alegría, felicidad, aceptación.. wow, nada se compara con lo intenso que es sentirme feliz, darle una sonrisa a alguien más, sentirme parte...
Por qué es todo tan difícil? No es justo. Quisiera que las cosas fueran más fáciles. No, quisiera una máquina de tiempo y volver atrás, pero con todas estas lecciones aprendidas. Quisiera recuperar el tiempo que perdí. Pero sé que no lo perdí. Sé que cada paso y segundo de sufrimiento fue, es y será necesario para ser yo mismo.
Con todo esto, me amo como no lo había hecho jamás. Me conozco más y mejor. No me amo un montón, pero me amo alguito. Me abrazo con compasión y me sumerjo en lo que sea que me proponga con un amor y pasión que no conocía. Sólo me duele estar en este lugar metafórico (y geográfico) y estar tan pero tan solo... Hoy me caí. Todavía no sé para qué lado.
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