Es que los estímulos sensoriales que trajo… qué poderosa es la mente creadora, qué detallada su infinita capacidad de manipular sensaciones, recuerdos, estímulos. Puedo sentir todavía en mis manos el roce de otras manos, en mi cuerpo el peso conocido de un cuerpo, el perfume del pelo, de esos labios. El gusto de aquel beso incendiario, en un lugar paradisíaco que había olvidado. Ver tan de cerca unas mejillas coloradas, unos ojos brillosos enfocados en mí, tan sonriente. Ese vestido tan conocido, su tela un contraste y una promesa…
No era yo, era alguien más. Sé a dónde y cuándo va a ser. Y quiénes y por qué. Pero me alegra experimentar la felicidad de otros, que amo y que también son yo. Me siento agradecido por haber recibido ese sueño, me llenó de felicidad, en un momento oportuno. Gracias universo por las bendiciones y oportunidades recibidas a diario, cada instante.
No comments:
Post a Comment