su alma luminosa era el sol
cegando este corazón sombrío,
pasados pesares que desato..
Pensé en espejos marchitos,
de posibilidades inventadas
y supe que no la haría feliz,
no con estos ojos malditos...
Por eso, apreciar su belleza
y aceptar la falta de instintos
es lo que toca esta vuelta
sabernos de mundos distintos..
No comments:
Post a Comment